sábado, 25 de abril de 2020

La vuelta a la tortilla (o no)

Pixabay


Parece que tu vida es tal, o cual, y que eso no va a cambiar jamás.


Pero mi propia experiencia me dice una cosa: a veces una situación inicial da tanto la vuelta que resulta increíble que eso suceda. A veces han de pasar minutos, horas, semanas, meses, un lustro o varias décadas. Y luego ocurre.

Otras veces no pasará. Es real. Pero siempre encontraremos una causa, una consecuencia, un consuelo, una razón oculta o una nueva fortaleza.

La vuelta a la tortilla puede ocurrir. Incluso sin que nos demos cuenta.

O puede no hacerlo.

Pero si la vida sigue, siempre  -por suerte- hallaremos una fina línea de luz, casi imperceptible.

La cuestión está en sentarse, en el sitio oportuno, y dejar que nos deslumbre.