"Puedes encabritarte como un caballo salvaje,
puedes decir palabrotas,
maldecir al destino,
pero a la hora de la verdad
tienes que resignarte".
Me quedo esta reflexión para toda la vida.
"Puedes encabritarte como un caballo salvaje,
puedes decir palabrotas,
maldecir al destino,
pero a la hora de la verdad
tienes que resignarte".
Me quedo esta reflexión para toda la vida.
y demasiados con nada".
Es de la película La mujer que camina delante.
Así es actualmente el mundo,
y así debe dejar de ser.
Hagámoslo.