viernes, 31 de diciembre de 2021

Faltarse al respeto a uno mismo

 también es prometerse algo y no hacerlo.

 Comprometerse solo contigo y no cumplir aquello a lo que te has comprometido

 es una falta de respeto a ti, a tu alma, a tu mente y a tu cuerpo.

 No quiero.

 No deseo.

 Faltarme al respeto.

 Así que, en este 2022, aparte de desear salud y empatía, voy a luchar por no hacér(me)lo.


P.D.: Gracias C, porque esta (también) te la debo.

 

 

Quien mata por sus ideales

 merece estar encerrado/a, al menos, un tiempo.

jueves, 30 de diciembre de 2021

Ahora mismo hay dos tipos de personas:

 Las que son borregos y las que creen que no son las que son borregos pero son borregos de otros.


 Adivina cuál eres tú.

miércoles, 29 de diciembre de 2021

La intolerancia a la lactosa

                             me ha salvado la vida.

                                                                  Lo tengo claro.

Brigadeiros sin lactosa, próxima creación.


Defectos y demás

 ¿Cuáles son tus mayores defectos?

 Yo: Positividad exagerada, cabezonería, perfeccionismo (Desorden e impuntualidad en vida personal).

 Mis padres: Desorden.

 Mi hermana: Que quieres abarcar mucho, más de lo que puedes...


¿Qué aportas a los equipos?

Mi hermana: ... pero siempre terminas todo.

Yo: Mediar, tratar de dar su lugar a todo el mundo, creatividad...


Y hasta aquí, la entrevista de hoy 29/12/2021. A ver los puntos que consigo.

 





domingo, 26 de diciembre de 2021

"-No estaba preparada para ser madre

 -¿Y yo lo estaba para ser tu hijo?".

 "Es raro que hagamos caso de los consejos que nos dan, así sin más".

 "Hay que ahogarse un poco para aprender a nadar".

 "Lo que yo vea y opine no tiene importancia, tienes que escuchar lo que llevas dentro".

 "Eres irremplazable".



- 'Infiel'.



sábado, 25 de diciembre de 2021

Navidad

 Que no te falte nada por decir.

 Que no te sobre nada de lo dicho.

 Que no.

 Que uno no se va cuando quiere, sino cuando puede.

 Que sí.

 Que uno permanece cuando toca un corazón.

 Y que estoy aprendiendo.

 A quererme y a querer.

 -

Reflexión basada en la serie HIT.




 

Nochebuena


 

jueves, 23 de diciembre de 2021

Solo se echa de menos a los muertos.

 Como dice mi amiga C: 

"Solo se echa de menos a los muertos".

 Los vivos que corran, que vuelen, que se vayan con viento fresco.

 Y si quieren permanecer, que se queden.

 Pero nada de echarles de menos.

Como dice mi amiga C:

"Solo se echa de menos a los muertos".




miércoles, 22 de diciembre de 2021

Mis insultos

A partir de hoy:

-Mongolo de padre y madre.

-Hija de fruta.

-Puto por parte de padre.

Extrapolables, con los cambios necesarios, a cualquier número y género o a ninguno.

Ya está bien de que siempre se ofenda aludiendo a la progenitora.

He dicho.

martes, 21 de diciembre de 2021

Si la culpa fue mía perdón; si fue tuya perdona

 


Imagina que el mundo entero, ante un problema, disputa o malentendido, dijera:

"Si la culpa fue mía perdón; si fue tuya perdona".

Imagina que el mundo entero quisiera resolver cada problema, disputa o malentendido.

A costa de renunciar al orgullo, a la venganza o a la ira.

Sin pestañearse.

Pues sí.

Es cierto.

Este mundo sería otro, ¿verdad?

Entonces, ¿por qué no empezar ya a ponerlo en práctica?

lunes, 20 de diciembre de 2021

Ella no

Comenzaré este texto pidiendo disculpas por hablar en su nombre.

Pero es que estoy segura de que ella no.

De que ella no querría que tu vida hubiese terminado con ella.

Igual que no quería que ninguno de sus sobrinos muriésemos por amor.

Igual que no quería que la vida de la tía acabase al fallecer la abuela.

Quizás sientas que todo ha acabado, pero tú sigues viviendo.

Tienes una sola vida. 

Y te mereces lo mejor que tu existencia pueda darte en cada momento.

¿Lo mejor sería ella? Sí, sin duda. Pero ella no está. Y tú sigues mereciendo lo mejor.

No puedes ni debes sentirte culpable por ello.

Estoy segura de que hay un trozo enorme de tu corazón que le pertenece

y eso siempre va a ser así. Lo vivido con ella está intacto y permanecerá.

Un amor tan grande como el existente entre vosotros no tiene fecha de caducidad, pase lo que pase.

Así que, por favor, no tengas reparos. Te lo pido por ella.

Lee, pinta y cocina. Pero no te pospongas en otros aspectos, no te machaques, no te cierres.

No le estás faltando al respeto a nadie, estás viviendo y no tienes que pedir perdón ni permiso.

Ella era especial y vuestro vínculo era único. De acuerdo. 

Ella, sin estar, forma parte de ti, al igual que vuestra relación. Continuarán ahí hagas lo que hagas.

Así que date todas las oportunidades. Son solo tuyas.

Una persona que reparte felicidad y buen rollo a todo el mundo no necesita que hablen en su nombre.

Pero seguiré haciéndolo, como su ahijada que soy. Si buscas en lo más profundo de ti, tendrás claro como yo que ella no querría esto.

¿Sabes una de las cosas que me enseñó la tía a través de su ejemplo? Que hay que dar a los demás la mayor felicidad y paz posibles, independientemente de lo que recibamos.

¿Sabes lo que yo pienso algunas veces, cuando me siento culpable o mal? Pienso que vivir o tratar de alcanzar lo mejor, de exprimir esto al máximo, de aprovechar, es una forma de honrarla a ella y a otros que no tuvieron elección. No elegimos quedarnos, pero tenemos que rendir pleitesía a quienes no pudieron hacerlo. Y eso solo puede hacerse viviendo con sus lecciones y enseñanzas presentes.

Si hay algún lugar desde el que ella nos observa, estoy segura de que a todos nos habla y de que a ti te está diciendo, con su voz calmada y perfecta para la radio: "A*******, A*******, sigue con tu vida".

Y a mi madrina, tú ya lo sabes, no se le puede decir que no.



domingo, 19 de diciembre de 2021

La candidez de tus palmeras

El más pulcro de este mundo. Así era tu corazón. 

Y aquella nochebuena faltaban tu plato, tus cubiertos y tu copa. Tampoco había silla para ti, ni regalos envueltos ni tarjeta de felicitación.

Ni tu voz radiofónica; ni tus preciosas manos. Tus pupilas se ausentaban, por supuesto, también.

Allí estábamos todos, rotos en mitad de los recuerdos, contemplando callados las dos palmeras que plantaste en el jardín mucho antes de que apareciera el monstruo. Ellas nos observaban tristes de vuelta.

Mirar a las palmeras o al cielo a través de la cristalera no nos bastaba. Es imposible que así sea cuando alguien hace de hada madrina a jornada completa, queriendo a los demás de mil maneras distintas y por cientos de razones diferentes en las que nadie más es capaz de reparar.

La mezcla de alegría por haberte disfrutado y de pena por perder tu abrazo enrarecía el aire en el salón. Costaba respirar y, entonces, te pronunciaste. Algo que los más pequeños de la familia no sabían identificar comenzó a caer y en apenas unos minutos cubrió las hojas de las palmeras. Era un hecho histórico. Desde la última vez habían pasado cuarenta años. Todos sonreímos y tu hermana logró llevar a las palabras lo que el resto de la familia sentía. Tu mirada era tan limpia y tu alma tan pura que, en la primera navidad sin ti, nevaste.