Es muy sencillo hacer parecer loco a alguien.
Tan sencillo que da miedo.
Es tan fácil escenificar que una persona no está cuerda.
Estallarle la vida.
Resquebrajar su existencia.
Arrebatarle todo el oxígeno.
Cuídate, por tanto, de que nadie te enloquezca
o esboce tu locura. Si acaso lo consiguiera
cuídate entonces
de protegerla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario