viernes, 1 de abril de 2022

Si esto ha de terminar,

 que termine cuanto antes.

 Si se va a acabar,

 que finalice.

 Si se va a enamorar,

 que se enamore.

 Si se va a marchar,

 que se largue.

 Si te va a traicionar,

 que lo arruine todo.

 Si te va romper el alma,

 que te parta el corazón.

 Pero tú no puedes vivir con miedo,

 no puedes compararte con otr@s,

 no puedes anticiparte a lo que llega,

 no puedes vivir en la ansiedad constante

 de a quién conocerá, de qué estará haciendo,

 de si se irá, de si alguien le gustará más, de si esto llegará a su fin.

 No puedes controlar lo que vea, lo que ame, lo que le llame la atención,

 lo que sienta, lo que piense, lo que sueñe, lo que le quite el sueño.

 Así que enfócate en ti.

 Tú eres lo único tuyo.

 Y tienes una suerte tremenda.

 La suerte de tenerte.

 De tener a todo ese ser tan especial

 dispuesto y disponible para ti.

 Disfrútate tanto.

 Disfrútate tan bien.

 Disfruta trabajándote.

 Disfruta mimándote.

 Disfruta conociéndote.

 Disfruta reinventándote.

 Disfruta de todos tus yo.

 Los pasados, los presentes y los futuros.

 Y si aún así, regresan las dudas, 

 la incertidumbre,

 la inseguridad 

 o el descontrol.

 Entonces, hazte estas tres preguntas:

¿Para qué quiero perder mi tiempo dándole vueltas?

¿Para qué quiero algo que no es para mí?

¿Para qué quiero estar con alguien que no quiere estar conmigo?

 En ellas está la respuesta:

"Mi tiempo es para mí. Quiero estar conmigo".




No hay comentarios:

Publicar un comentario