Hay un montón de pequeñas grandes historias.
Preciosas. Imposibles. Tristes. Sádicas. Resilientes. Privilegiadas. Bellas.
Fantásticas. Surrealistas. Increíbles. Tortuosas. Crueles. Graciosas. Aburridas.
En cada lugar del mundo.
Ocurren.
A diario.
Pequeñas grandes historias.
Como la de la película 'La terminal'.
Basada en hechos reales.
Posdata: Para mí, las mejores escenas son la de la cena entre Tom Hanks y Catherine Zeta-Jones,
donde todos le ayudan a preparar y desarrollar la cena de un modo simpático y el indio trata de hacer
más amena la velada haciendo malabares y la escena en la que él se va del aeropuerto a Nueva York,
donde todos le quieren regalar cosas y la policía finalmente le deja pasar.
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