Tiempo. Es todo lo que a veces necesitamos.
Tiempo para cicatrizar heridas, tiempo para encontrar nuestro hueco en el mundo, tiempo para asumir el dolor de una pérdida… No podemos controlar cuanto tiempo necesitaremos… Pero sí aprovecharlo. Me explico: No debes limitarte a esperar. Debes luchar para sentirte orgulloso de ti mismo.¿Cómo? Ocupando ese tiempo. Haciendo todas las cosas que dependan exclusivamente de ti. Aquellas cosas en las que este tiempo que necesitas no intervenga en absoluto.
Ve a por tus sueños. Es el momento.
En algún sitio leí que “Encontrarse perdido no es malo… Es el principio del camino para realizarse como persona.”
Nunca jamás había tenido tanto sentido esta frase para mí. Nunca hasta hoy.
Y ahora sé que el sentido del dolor, de la herida, de haber estado perdido… sólo se encuentra al final.
Al final, ese tiempo que tanto necesitabas terminará pasando. Casi sin darte cuenta.
Es entonces y sólo entonces cuando la razón que buscabas aflorará.
Y tendrás paz. Pero esa paz es aún más grande si en tu recorrido no has perdido el tiempo.
Porque esa herida se curará, encontrarás tu lugar y superarás esa pérdida…
Pero hay algo que no volverá si dejas que pase: el tiempo.
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